Sevilla, con una proyección cultural increible y con un patrimonio artístico inigualable, Sevilla se mantiene fiel a sus orígenes y cala hondo en quien la visita. Colores albero de feria y ruedo, enamorarse de esta tierra es lo más fácil; es más, es obligatorio. Enclavados en Andalucía resulta, de por sí, una ventaja competitiva que poseen las ocho provincias del sur de España a la hora de posi-cionar su oferta en el mercado turístico internacional.
Pero cuando hablamos de Sevilla y su provincia, de sus rasgos propios y diferenciadores, la monu-mentalidad y la naturaleza cobran un destacado protagonismo.
Porque en el vasto territorio sevillano, desde el esplendor de la capital a los tesoros de nuestros municipios, encontramos el mayor número de joyas arquitectónicas de toda Andalucía que se encuentran declaradas Bienes de Interés Cultural.
Un privilegio, el de poder admirar esos conjuntos monumentales, que se une al hecho de contar con parajes naturales de incalculable valor ecológico y de una belleza sin par.
Propuestas ambas, entorno natural y riqueza arquitectónica, que se conjugan y se enriquecen con la gastronomía y el flamenco y, por supuesto, con el hecho de tener siempre a la Giralda a media hora de cualquiera de los encantos de la provincia de Sevilla.