En un espectáculo flamenco en Sevilla podrás disfrutar de una amplia gama de palos del género. Las alegrías es uno de los más destacados, produciendo entre los asistentes las mejores reacciones que pudiéramos esperar. Es uno de los bailes flamencos más antiguos que bebe de otros muchos estilos.
El rasgo más característico de este puede que sea su compás, que comparte con otros palos como la soleá, aunque lo más significativo que hace reconocible a este palo es que siempre empieza con el cante del “tirititrán, trán, trán”.
Los profesionales como los de Tablao los Gallos destacan que las alegrías es un palo flamenco que se nutre de distintos estilos como pueden ser las seguiriyas, los fandangos de Cádiz y los jaleos. Es por ese motivo que en muchas letras puede verse cómo se habla de la Virgen del Pilar, el río Ebro y Navarra.
Destacan la intervención de cantaores como El Quiqui o Paco Hidalgo, quienes aportaron bastante a la evolución del palo que se llamaría finalmente alegrías. A finales del siglo XIX, fue Enrique El Mellino, quien lo acerca más al estilo que conocemos en la actualidad.
Pero fue Ignacio Ezpeleta quien introdujo el ya citado “tiriti trán trán trán”. Esta expresión hace que podamos reconocer este palo sobre cualquier otro. El compás es similar al que se llevan a cabo en las soleás, aunque con una tonalidad un poco más alegre.
El baile por alegrías es de mayor tradición flamenco y sirve para que otros palos flamencos para que se ponga en marcha las coreografías propias. Es uno de los bailes flamencos de mayor antigüedad.
Con una estructura de lo más característica formada por la salida, las llamadas, desplantes entre letras, escobillas con zapateado y silencio de cante donde las castañuelas pasan a tener un papel fundamental.
Disfruta de un género tan interesante en cualquier espectáculo flamenco en Sevilla.